English
Spanish
ArabicEl impacto de COVID-19 en las cadenas de suministro
Antes de la pandemia, el modelo de cadena de suministro justo a tiempo (JIT), que minimiza el inventario para reducir los costos, era la norma. Sin embargo, este modelo expuso las vulnerabilidades de las empresas cuando COVID-19 aceleró el cambio en todas las verticales de la industria de la cadena de suministro, especialmente en el almacenamiento.
El cambio al trabajo remoto y el aumento exponencial del comercio electrónico expusieron las cadenas de suministro a demandas aplastantes y a una gran interrupción. Las empresas no sabían si sus almacenes iban a estar vacíos semana a semana, o si iban a estar sobreabastecidos. El espacio industrial adicional que no se usa es una gran tensión financiera para un negocio, pero por otro lado, los patrones de compra fueron tan inestables durante la pandemia que el desbordamiento también se convirtió en una preocupación financiera.
Con los cambios en las preferencias de los consumidores, los reveses en la cadena de suministro, los retrasos en los proyectos y más como resultado de la pandemia, nunca ha habido una mayor necesidad de espacio regional que se pueda arrendar en términos flexibles. Debido a la naturaleza y la incertidumbre de la economía, muchas empresas no quieren comprometerse con un subarrendamiento a largo plazo por espacio, pero al final del día, todavía necesitan una solución. Los inquilinos y propietarios también quieren la oportunidad de generar ganancias si tienen espacio no utilizado simplemente acumulando sus gastos. El almacenamiento a corto plazo y bajo demanda ha permitido a las empresas de todos los tamaños e industrias tomar decisiones inteligentes sobre el espacio del almacén y planificar de manera más efectiva para el futuro durante COVID-19.
El aumento de la popularidad del almacenamiento a corto plazo
Es comprensible que la industria de la cadena de suministro no quiera arreglar lo que no está roto. Sin embargo, cuando llegó la crisis de COVID, muchos procesos y flujos de trabajo tradicionales comenzaron a fallar. Esto aceleró la necesidad de soluciones más innovadoras y nuevos servicios basados en la tecnología como Chunker se convirtieron en una necesidad principal.
El arrendamiento de almacenes se ha basado durante mucho tiempo en compromisos y necesidades a largo plazo. Por ejemplo, una empresa tendría que comprometerse con un contrato de arrendamiento de 10 años, lo que significaba predecir y planificar las necesidades de espacio en el transcurso de una década. Esto dejó un montón de margen de error, especialmente a medida que el comportamiento del consumidor evolucionó tan rápidamente.
El almacenamiento bajo demanda a corto plazo respalda las cadenas de suministro en la nueva era al agregar agilidad y flexibilidad. Las empresas ya no necesitan firmar un contrato de arrendamiento de cinco años cuando solo tienen un problema de cinco meses que resolver. Al permitir acuerdos a corto plazo, el almacenamiento flexible permite que una empresa responda más rápido.
Además, las empresas pueden aprovechar las nuevas oportunidades y entrar en nuevos mercados más rápido. Por lo general, se tarda de seis meses a un año en obtener y asegurar el espacio de almacenamiento a largo plazo. A través de opciones de almacenamiento a corto plazo y bajo demanda, una empresa ahora puede encontrar espacio industrial en 24 horas y entrar en un nuevo mercado, mientras planifica a largo plazo. Esto permite mejores pruebas de mercado, al tiempo que elimina algunos de los riesgos que conlleva ingresar a un nuevo mercado.
Mirando hacia el futuro: Lo que está reservado para el espacio de almacén y las cadenas de suministro
Donde veremos proliferar el almacenamiento a corto plazo y bajo demanda es en áreas como la construcción, los despliegues de 5G, las remodelaciones de hoteles y el almacenamiento desbordado para el comercio minorista y el comercio electrónico. Por ejemplo, los proyectos de construcción requieren que los camiones cargados de mercancías se traigan al sitio, lo que requiere un espacio a corto plazo para el almacenamiento de materiales. El almacenamiento flexible se volverá cada vez más vital para la resiliencia de la cadena de suministro en el futuro, y es menos costoso que un ladrillo y mortero tradicional.
Los almacenes bajo demanda a corto plazo son el siguiente paso natural en la evolución de los bienes raíces comerciales y el espacio industrial en particular. En los últimos años, hemos visto el espacio evolucionar y adaptarse a los nuevos participantes en el mercado, como el espacio de oficinas bajo demanda, los alquileres a corto plazo, el co-living, el comercio minorista emergente y más. A medida que la industria continúa cambiando y adaptándose a más soluciones bajo demanda, continuará siendo un recurso de referencia para las personas que buscan conveniencia, simplicidad y eficiencia para encontrar y arrendar espacio de almacén en la era posterior a la pandemia.
